Dicho así puede sonar poco romántico, pero os aseguro que es muy muy emocionante.
Os dije que tengo la mejor gine del mundo? El jueves cuando me comunicó que la inseminación sería el sábado, me dijo que no le tocaba trabajar a ella, pero que me llamaría por la tarde,estaba intentando cambiarse la guardia. Y si, se la pudo cambiar!!!!
El jueves lo pasé bastante tranquila pero el viernes..... ayyy el viernes!!! Sabéis la sensación esa de recién enamorada? Las maripositas en el estomago, las palpitaciones, los suspiros.... Lo tenia todo!
Me costó dormir, de hecho creo que no quería dormir.
El sábado al llegar a la clínica ya me estaban esperando. Me pasaron enseguida a la consulta, la misma en la que vi por última vez a Alicia. Me hicieron desvestirme (sin preliminares ni nada, que poco sensible quitarme las bragas para dejarme embarazada y encima no invitarme a desayunar!).
Tuve que esperar un poquito porque la muestra de semen del donante le faltaba un poco aún para estar en su punto. Mientras la enfermera entró y salió unas cuantas veces, una de ellas para imprimir unas ecos que previamente puso en la pantalla, de un bebé precioso y con latido, lástima que esa eco no fuera mía!
Después de imprimir al eco de la otra chica puso mi nombre en el ecografo y me quedé un poco pensativa, hasta el momento con el otro gine nunca usó el ecografo en la inseminación (siempre me había tocado eco en sábado y nunca con mi gine de guardia). Prepararon el material y a por ellos!
Esta vez no me molestó nada de nada, fue todo muy suavecito. Y lo mas mágico.... mientras introducía los bichitos puso el ecografo y me enseño como entraban. Os parecerá una chorrada pero me encantó ver esa mancha blanca moviéndose dentro de mi útero. Ahí estaban mis bichitos! Mis campeones! Mi futuro posible hijo! Ahora les tocaba trabajar a ellos. Mi gine me cogió la mano con fuerza y me dijo "Tu ya has hecho todo lo que podías hacer, ahora les toca a ellos".
Me dejaron reposar diez minutitos en la camilla y la enfermera me regaló el tubo de ensayo que contenía la muestra de semen, la mitad de la genética de mi hijo.
En ese momento pude visualizar y sentirme cerca de mis hijos, de mis dos estrellas y de los que vendrán. Es impresionante como se nota su presencia. Me dan tanta paz... Siempre los siento cerca pero en esa sala, donde he estado con ellos vivos, donde los he visto y he escuchado sus corazones la conexión es aún mas fuerte. Puedo cerrar los ojos, hablar con ellos y sentir que me escuchan. Como dice mi mejor amiga, en el ambiente se respira polvos de ala de hada!
Aunque no os lo creáis, y como gran novedad, NO LLORÉ!!!!!
Después me hicieron pasar al despacho de la bióloga que me explico las características de la muestra y del donante. Me dijo que habían hecho una selección de espermatozoides y que solo me habían puesto los que estaban estupendos, un total de 5,4 millones, alguno tendrá que ganar, no?
El donante esta vez no me ha parecido tan guapísimo como los otros dos, es mas normalito, mas como yo. Han priorizado grupo sanguíneo y que fuera un donante de fertilidad asegurada (ya hay mas niños por el mundo con la mitad de su genética). La bióloga me explico que tanto Andrés como Alicia también tienen hermanitos, lo miró y sus donantes también han conseguido bebés vivos (ahí me derretí de amor...)
Al salir mi gine vino a verme, me dio un abrazo de los grandes y me deseo suerte y una espera lo menos estresante posible.
Ya fuera de la clínica pensé que tenia que convencerlos para quedarse en mi y me fui de compras, resultado: dos toquillas de hilo suavecitas y dulces, para que se quieran quedar para siempre. Ya he dormido una siesta con ellas y os aseguro que dan un gustito....
Esta noche empiezo con la pringue-progesterona, que acentúa aun mas mi flujo adicción, pero que ayuda a que los pequeñines se enganchen bien fuerte a mamá.
Creo que ya estoy enamorada de mi posible hijo, para mi San Valentin fue el 15 de febrero.
Siguiente meta: test de embarazo!